18/09/2011
No hubo sorpresa ayer en el MGM Grand de Las Vegas. El invicto Floyd Mayweather Jr (42-0) noqueó al estadounidense de descendencia mexicana Víctor Ortiz (29-3-2), ante 15.000 espectadores, en el cuarto asalto de una pelea por el título del peso welter, en la versión Consejo Mundial de Boxeo (CMB).
Sin embargo, esta vez hubo controversia de por medio: cuando Ortiz fue a disculparse por un cabezazo intencionado, Mayweather, inmediatamente después de que Joe Cortez permitiera la reanudación de la pelea, le propinó un gancho y un directo que pusieron punto final al combate.
Ante la controversia que se había creado en torno a la acción, Joe Cortez defendió su decisión: "Estaba vigente ya el tiempo de pelea y cada púgil necesita tener la guardia alta y protegido. Y prosiguió: "No hubo nada ilegal".
En la misma línea se expresó el autor de los hechos y vencedor del combate, Floyd Mayweather: "Habíamos tocado los guantes y volvíamos a la pelea y fue cuando saqué mi mano izquierda y luego la derecha para iniciar las acciones”. "En el cuadrilátero tienes que protegerte a ti mismo todo el tiempo", comentó.
A pesar de la valentía de Vicious Ortiz, Mayweather dominó la mayor parte del enfrentamiento, mostrándose muy ágil y certero en sus golpes –aunque algunos de ellos rozaron la ilegalidad-. Ortiz, de 24 años, se encontró, como tantos otros, con el problema de un gran juego de piernas y rapidez del campeón, siempre escurridizo y letal en sus golpes.
Money Mayweather, ahora tres veces campeón del mundo del peso welter, no peleaba desde el 20 de mayo de 2010, cuando se impuso a los puntos a su compatriota y excampeón Shane Mosley. Esta inactividad no se reflejó en ningún momento durante la velada de ayer, ante un rival muy fiero y con algunas combinaciones que dieron emoción al choque, aunque tácticamente mal preparado. Las estadísticas así lo corroboran: 73 golpes conectados de Mayweather al cuerpo o cara de Ortiz por tan solo 26 de 14 del excampeón.
El púgil de Michigan demostró, una vez más, que está muy por encima del resto. La sensación de superioridad respecto al verdugo de André Berto no es nueva para el aficionado, que ha visto el mismo guión ante grandes boxeadores como Zab Judah o el citado Sugar Shane Mosley, por ejemplo. Solo el desaparecido Arturo Gatti, Ricky Hatton u Óscar de la Hoya le plantearon problemas a Mayweather sobre el cuadrilátero.
Ahora hay que esperar acontecimientos para el combate que todo el mundo desea, el que enfrentaría a Mayweather contra Manny Pacquiao, el único peleador que, en este peso, podría hacerle frente. Pero, por un lado, el filipino deberá deshacerse del gran campeón mexicano Juan Manuel Márquez, con quien vivió dos auténticas guerras que acabaron en nulo y con decisión dividida respectivamente para Pacman. Y por el otro, Mayweather deberá esperar a ser declarado inocente de todos los cargos en un juicio que tiene pendiente por violencia doméstica.
Traductor-intérprete y periodista
Carrera en Diario Metro, Diario 20 Minutos, Cadena COPE Barcelona, Radio Loca FM, y TV3
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