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| Foto: Getty Images |
24/06/2012
La selección de Vicente del Bosque volvió a mostrar su
supremacía en el terreno de juego en los cuartos de final derrotando a Francia
por 2-0 en un partido en el que fue clara dominadora del encuentro de principio
a fin. Ambos goles de España fueron obra
de Xabi Alonso que cumplía su partido número cien con la selección nacional.
El partido no pudo haber comenzado de mejor manera para
España. En el minuto 19 Jordi Alba se
escapaba por la banda izquierda y tras una fantástica jugada individual
centraba un balón templado al corazón del área que Xabi Alonso remataba de
cabeza para anotar el primer gol de los ibéricos. El tanto daba confianza al equipo que
dominaba la posesión del balón y opacaba los ataques puntuales de Benzema y
Ribery por parte de los galos.
Los hombres de Laurent Blanc nunca llegaron a representar
una verdadera amenaza para España. La ocasión más clara de Francia llegó en
mediante un tiro libre de Cabayé a la media hora de partido que Casillas desvió
sin demasiados apuros a corner.
Del Bosque se decantó por un planteamiento sin referente
claro en ataque, optando por Cesc Fàbregas como hombre más adelantado jugando
en la posición de falso nueve. El catalán, que ha venido jugando en esa
posición desde el inicio del torneo, se movió bien entre líneas y se asoció con
Iniesta y Silva en ataque, aunque sin crear demasiadas ocasiones de gol. La
táctica permitía que España fuera absoluta dominadora del balón con el objetivo
de desgastar física y anímicamente a los galos.
La segunda parte fue más de lo mismo. España continuaba
manteniendo la posesión del balón y Francia no generaba ocasiones, a pesar de
la entrada de hombres de ataque como Nasri, Menez y Giroud al terreno de juego. Del Bosque también hacía cambios en su
esquema dando entrada a Pedro, Torres en lugar de Silva y Cesc que comenzaban a
mostrar su cansancio. Iniesta también era substituido por Santi Cazorla.
Y una vez más el técnico salmantino demostró que sabe leer
muy bien los partidos de su equipo ya que la entrada de Pedro revolucionó el
ataque de España. A pocos minutos del final, el canario penetró el área rival y fue derribado por Réveillère. El colegiado italiano no dudo en
señalar la pena máxima que Alonso se encargó de convertir para sentenciar el
partido y dar el pasaporte a España a las semifinales contra Portugal.
Jon Fernandez
Redactor MotivaGoal
