13/02/2012
El ‘submarino amarillo’ reafirmó su recuperación con un nuevo triunfo que le deja a tres puntos del descenso y a cinco de Europa. El Granada realizó un gran encuentro, pero no le bastó para rascar algo positivo ante un rival directo. Iñigo Martínez dio un atisbo de esperanza al firmar las tablas tras el gol de Marco Ruben, pero una genialidad de Borja Valero y una pifia de Julio César firmaron la primera derrota de Abel Resino.
Que Molina le ha cambiado la cara al Villarreal ya era evidente antes del duelo. Los precedentes, en forma de una buena racha, invitaban al optimismo y, sin jugar el mejor partido, los tres puntos se quedaron en casa. En parte, fue así a raíz del gran momento que atraviesan Borja Valero y Marco Ruben. Ambos son los máximos realizadores del Submarino y, como buenos aliados ante el gol, no fallaron ante su cita.
Al Granada le faltó eso, más suerte de cara al gol, pues fútbol si puso. La apuesta de realizar una fuerte presión no le dio mal resultado y, en más de una ocasión, ahogó el sistema creativo del Villarreal. En esa labor, el trabajo de Mikel Rico resultó crucial. Recuperó y generó juego a partes iguales, facilitando la labor de los tres hombres de arriba. Del mismo modo, Martins también fue un incordio para los de casa con sus envenenados disparos desde larga distancia. De hecho, en más de uno rozó el gol.
Iñigo López niveló la balanza tras el tanto de Marco Ruben
Aunque, quien abrió la lata fue Marco Ruben en un alarde de magistral definición. Recibió un excelente pase al hueco de Cani y la picó ante la salida de Julio César. El mérito no esta solo en la ejecución, sino también en la dificultad de la jugada, ya que estaba escorado a la derecha –con poco ángulo– y forzado por el pegajoso marcaje de Iñigo López. El argentino, tras su ausencia en Sevilla por lesión, volvió al once y firmó su séptimo gol de la temporada.
Al Granada no le afectó demasiado el gol y siguió a lo suyo. Su mayor peligro llegó a balón parado con las peligrosas incursiones de Iñigo López. El central ya avisó en el 26´ con un cabezazo que impactó en el poste tras un corner botado por Martins. Dicha acción fue calcada a la del 50´, solo que esta vez la madera no se alió con el Villarreal. El central rojiblanco estalló de alegría con su tanto pero, tan solo dos minutos después, sufrió un trago amargo a raíz de una lesión que le obligó a abandonar el partido. Sin su capitán, los de Abel perdieron seguridad defensiva y lo terminaron pagando.
Un golazo de Valero y una cantada de Julio César, decidieron el partido
De hecho, sea casualidad o no, fue a partir de ahí cuando llegaron los dos goles amarillos que decidieron la contienda. El 2-1, un golazo de Borja Valero. El ex del Mallorca recibió un pase de Camuñas, controló con la zurda y la enganchó con la diestra por el primer palo. El mazazo definitivo para el Granada llegó con la fatídica cantada de Julio César. El cancerbero, en su intento de quitarse un centro de Joan Oriol, se equivocó y se la terminó despejando en su propia portería. Ese error garrafal supuso el 3-1 y fue decisivo para que los tres puntos se quedaran en Villarreal.
El encuentro, también, dejó un esperado retorno, el de Nilmar. No jugaba desde hace un mes y se mostró con ganas de agradar. Presionó a los defensores, pero aún le falta esa punta de velocidad que le hace ser decisivo. Aún así, tuvo una buena ocasión para marcar con un zurdazo al que respondió Julio César con una gran estirada. Además del brasileño, otra aparición destacada fue la de Martinuccio. El argentino disputó sus primeros minutos ante su parroquia y, aunque no marcó, si le dio un gol cantado a Hernán Pérez. Pero, esta vez si, Julio César hizo una gran parada para evitar el 4-1.
El Villarreal se queda a tres puntos del descenso; El Granada, a dos
A los de Abel Resino les acabó de tumbar la expulsión de Diakhaté. El de Senegal, que fue el que entró por Iñigo López, vio la segunda amarilla en el 88´ y dejó a los suyos con un hombre menos en los últimos minutos del choque. Antes de esta acción, el Granada pudo maquillar el marcador en las botas de Martins y Mikel Rico, pero ambos no tuvieron el acierto necesario ante Diego López. Eso es lo que le faltó al Granada y, ahora, se queda decimosexto a dos puntos del descenso.
El Villarreal, a falta de lo que haga la Real Sociedad ante el Sevilla, asciende a la decimocuarta posición y deja el descenso a tres puntos. Mientras que unos objetivos utópicos hace no tantas semanas, la Europa League (cinco puntos) y la Champions (seis puntos) no están tan lejos. La buena racha (diez puntos de doce posibles en los últimos cuatro partidos) ha plasmado la mejoría y hace soñar a la afición con cotas más ambiciosas. Aunque, el objetivo principal sigue siendo la permanencia…
3- Villarreal C.F: Diego López; Ángel, Zapata, Marchena, Joan Oriol; Cani, Senna, Borja Valero, Camuñas (Hernán Pérez´89); Nilmar (Castellani´62), Marco Ruben (Martinuccio´76).
1- Granada C.F: Julio César; Nyom, Iñigo López (Diakhaté´57), Borja Gómez, Siqueira (Henrique´70); Mikel Rico, Fran Rico (Uche´68); Jara, Martins, Dani Benítez; Ighalo.
Goles: 1-0 Marco Ruben min.16, 1-1 Iñigo López min.50, 2-1 Borja Valero min.64, 3-1 Julio César (p.p) min.74.
Árbitro: Pérez Lasa (Colegio vasco). En el Villarreal C.F. amonestó a Cani (53´), Marchena (90´). En el Granada C.F. expulsó por doble amonestación a Diakhaté (70´ y 88´). Además, mostró la amarilla a Ighalo (30´) y Jara (32´).
Datos: Encuentro de la vigésimo tercera jornada de Primera División disputado en El Madrigal ante 13.000 espectadores. Terreno de juego en buenas condiciones.
Manuel Monfort Marzá
Redactor de Fútbol - MotivaGoal
Colaborador - Villareal CF
manuelmonfortmarz8@gmail.com
Twitter: @Manuelmonfort
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Carlos Muñoz
