Repasamos la vida profesional de Alfredo Di Stéfano en esta completa biografía. Contiene sus inicios en River Plate y Millonarios, la historia de su fichaje, la tremenda influencia en el Real Madrid de las cinco Copas de Europa, su secuestro, su trayectoria como entrenador...
Noche de Halloween en la que
Villarreal (4º clasificado, 20 puntos) y Getafe (6º, 16 puntos) se miden por
Europa. En la pasada jornada, ya vivieron un envite ante rivales directos
con un resultado opuesto: victoria por 4-1 para el Submarino ante el Valencia y
derrota por la mínima (0-1) para el cuadro azulón frente al Athletic. En su
segundo partido consecutivo en casa, el Villarreal busca un nuevo triunfo que
le garantice seguir en Champions. El ‘Geta’, después de ver interrumpida una
racha de 4 victorias, afronta el reto de puntuar en una de las canchas complicadas.
En El Madrigal, el Villarreal solo ha cedido un empate ante el Real Madrid; el
resto, cuatro triunfos. Además, el Getafe, en sus visitas al feudo groguet,
solo ha sido capaz de sacar 4 puntos (un triunfo y un empate) por 6 triunfos
del Submarino. Si bien, el Getafe viene de ganar en sus dos últimas salidas
(Granada y Espanyol) y confía en seguir sumando a domicilio.
Villarreal y Getafe se
presentan como dos de los equipos más en forma de Primera. No en vano, por algo
están en la zona alta. El conjunto madrileño empezó mal pero, en las últimas
fechas, ha crecido sobremanera hasta el punto de situarse en Europa. Su derrota
ante el Athletic no debe considerarse como un paso atrás. Como mínimo, hizo
méritos para empatar y ni de penalti pudo. El Villarreal empezó como un tiro y
mantiene su alto ritmo. La goleada ante un rival como el Valencia manifiesta
que cuando reluce su potencial ofensivo, resultado complicado pararle. Algo que
tratará de hacer mejor que los ‘che’ el Getafe, un conjunto incomodo, bien
plantado y con las ideas claras. Se prevé un partido con el Villarreal llevando
la iniciativa y tratando de desarbolar al Getafe con su juego directo. Este
último, basará su planteamiento en una presión intensa y rápidas transiciones a
la espalda de la defensa.
Rotaciones
en los dos bandos
Ambos técnicos harán rotaciones
ante los tres partidos que afrontan en una semana. Marcelino baraja sentar a
Dorado y Trigueros y apostar por Pablo Iñiguez y Pina. Del mismo modo, no puede
descartarse por completo que Bruno o Cani descansen, ya que ambos arrastran molestias.
Por su parte, Hernán Pérez y Uche cuentan con opciones de seguir en el once
debido a su buen partido ante el Valencia, con gol incluido para ambos. Quién
tiene su sitio fijo es Giovani, autor de un doblete ante el Valencia. El
mexicano se encuentra en el mejor momento de su carrera y se presenta como la
principal baza para tumbar al Getafe. Se caen de la convocatoria Jokic y
Farinós por lesión, además de Moi Gómez –juega con el Villarreal B ante el
Atlético Baleares– y Pantic por decisión técnica. Vuelve a una citación Gabriel.
El Getafe, que jugó el
lunes, llega con un día menos de descanso. Con tal de oxigenar al equipo, Luis
García ha anunciado que hará de 2 a 4 cambios en el once. Una obligatorio en la
punta de lanza por la lesión de Colunga. Para suplirle opositan Lafita y Marica. Las otras inclusiones apuntan a Alexis y Míchel. El central tiene papeletas
para entrar por Rafa y ocupar, junto a Lisandro, el eje de la zaga. Míchel
formaría el doble pivote reemplazando a Mosquera o Borja. No descansan Pedro
León y Sarabia, ambos en un dulce momento. Los centros y la precisión a balón
del parado del interior, unido a la visión de juego del mediapunta, se antojan las
máximas amenazas para el Villarreal. No viajan Colunga y Arroyo por lesión y Juan
Rodríguez y Lopo por motivos técnicos. Regresa Lacen a la lista, ausente en los dos últimos duelos por decisión técnica.
La noche de Halloween estará
presente en El Madrigal y le traerá una pesadilla al que caiga derrotado.
Se esperaba con mucha
expectación el partido entre blaugranas y madridistas, pues está claro, que son
dos de las mejores plantillas del mundo y como suele ocurrir, el mencionado
duelo fue un autentico fiasco, pues ninguno de los hizo meritos para ganar y
los dos entrenadores estuvieron muy por debajo de sus equipos, especialmente,
Ancelotti.
Ya escribí un artículo
acerca de las contradicciones que tiene el técnico italiano, pero cada día que
pasa, su inutilidad y su escasa capacidad para dirigir la nave merengue queda
al descubierto. La táctica y la alineación del pasado sábado en el Camp Nou fue
un autentico regalo para los azulgranas y una bomba envenenada para los
madridistas. Como ya es sabido, utilizó a Sergio Ramos de mediocentro… El
sevillano es un excelente central que posee grandes condiciones, pero la
técnica no está entre ellas y eso lo notó el Madrid, que regaló casi 60 minutos
de partido. Al menos, acertó con los cambios y la entrada de Illarramendi,
Benzema y Jesé mejoró notablemente al equipo. Si hubiese apostado por el de
Mutriku como ha estado haciendo en los últimos encuentros, está claro que el
resultado hubiese sido otro. Una vez más, el italiano demostró no estar a la
altura del Real Madrid. Con razón los culés se alegraban tanto de la marcha de
Mourinho del Madrid, pues de estar el genial pero siempre polémico técnico
portugués, no habría habido color.
El otro factor
determinante fue el trencilla del encuentro, Undiano Mallenco, quien regaló el
triunfo al Barça con una actuación que pasará a la historia por la galería de
errores que cometió. Hasta tres penaltis reclamó el cuadro madridista: dos de
Adriano, uno por mano tras un remate de Khedira y otro por dar una patada al
alemán y el otro, y el más claro de los tres, un empujón escandaloso de
Mascherano a Cristiano Ronaldo. Último jugador y ocasión manifiesta de gol,
penalti y expulsión, pero incompresiblemente, el navarro se hizo el sueco y
truncó de esta manera, la posible remontada madridista.
Lo más alarmante, es la
falta de criterio y de moralidad cuando se favorece a un equipo u otro. Si
cuando al Madrid le regalaron 2 puntos a última hora en Elche, toda España y
los principales diarios deportivos se levantaron indignados con ese hecho. Sin
ir más lejos, hasta Victoriano Sánchez Arminio, presidente de los árbitros,
reconoció abiertamente que Muñiz se había equivocado y lo mandó a la nevera. ¿Por qué no lo hizo cuando este
mismo árbitro se equivocó a favor del Barça? ¿Por qué no habla ahora? Esto
muestra que nos encontramos ante una Liga amañada y que difícilmente tendrá
otro ganador que no sea el Barça, pues los tratos de favor en los últimos años
rozan el esperpento.
La
doble moralidad de los culés con los árbitros
El único integrante de
la plantilla blaugrana que ha tenido la ética de reconocer que se equivocó
Undiano ha sido su entrenador, quien a pesar de llevar menos tiempo que nadie
en el club, ha demostrado tener más honradez que los que presumen de haberse
criado en una cantera y un club que les transmite teatro, mentiras y
manipulación.
Los jugadores
blaugranas parecen olvidar que ellos son los pioneros a la hora de poner
excusas a la derrota. Tan sólo vale con echar un vistazo a la hemeroteca para
leer las declaraciones de los azulgranas cuando pierden. La doble moralidad que
se gastan es incomprensible, pues hablamos de un club que ha ganado Champions
con los escándalos del Stamford Bridge o el Bernabéu.
Esto corrobora, que los
jugadores del cuadro catalán ya no engañan a nadie con los falsos valores. Son
grandísimos jugadores, la mejor generación que ha tenido el Barça en su
historia y seguramente, el mejor equipo de la historia del fútbol, pero sus
virtudes con el balón en los pies las ensucian con una mediocre conducta.
Luis Alberto Reyes Almansa
Periodista Deportivo Redactor Liga BBVA MotivaGoal Twitter: @LuisAlbReyes
He de reconocer que no
ha sido fácil elegir al MVP semanal en esta jornada, puesto que han sido muchos
los jugadores que han hecho meritos para lograrlo: El Zhar, Ebert, Griezmann o
Villa podrían haberlo obtenido, pero en esta ocasión, me he decantado por el
jugador mexicano del Villarreal, Gio Dos Santos. Sus dos goles y asistencia en
la contundente victoria del ‘submarino amarillo’ frente al Valencia, le hacen
merecedor de este galardón. No es que haya habido una gran diferencia respecto
a los futbolistas mencionados anteriormente, pues los meritos son similares,
pero he querido premiar la buena trayectoria tanto del mexicano como de su
equipo en este inicio de campaña. Para resumir, la regularidad de Gio le ha
valido para obtener ya este premio.
En una jornada marcada
por el ‘Clásico’ entre Madrid y Barça, destacan las goleadas del Celta fuera de
casa frente al Málaga o la del Atlético de Madrid en el Calderón frente al
Betis, donde Oliver anotó el tanto más rápido del cuadro rojiblanco en Liga, ya
que tan sólo tardó 13 segundos en introducir el esférico en el marco de
Guillermo Sara.
La victoria del Granada
en sus ya duelos calientes con el Elche o el segundo triunfo del Bilbao a
domicilio han sido otros de los hechos destacados de la jornada. Como
curiosidad, destacar que en la mencionada victoria bilbaína en el Coliseum de
Getafe se rompieron dos rachas históricas: La de Diego Castro, que falló un
penalti tras 15 aciertos consecutivos y que fue la primera victoria del equipo
vasco en el feudo azulón, pues nunca había conseguido ganar.
Y respecto al partido
en el que estaban todas las miras puestas, comentar brevemente, que la victoria
blaugrana se cimentó en dos pilares fundamentales: Ancelotti y Undiano
Mallenco. La ya comentada en alguna ocasión inutilidad del técnico madridista
unido a un sibilino, polémico y teledirigido arbitraje, le valieron a un
mediocre Barça para llevarse el gato al agua.
Lo ajetreado del
calendario tiene estas cuestiones y mientras muchos de nuestros lectores lean
esta crónica ya estará en juego una nueva contienda liguera. ¡Viva el fútbol!
Luis Alberto Reyes Almansa
Periodista Deportivo Redactor Liga BBVA MotivaGoal Twitter: @LuisAlbReyes
El derby no tuvo color. El
Villarreal fue muy superior y se impuso con claridad al Valencia, al que le
endosó un 4-1 que le reafirma en la cuarta plaza y deja a los che a 7 puntos de
la Champions. Antes de la media hora, el Submarino ya ganada por 2-0 con goles
de Uche y Hernán Pérez. Tras el descanso, Giovani exhibió dos ‘delicatessen’ en
forma de golazos, uno de espuela y otro por la escuadra. El mexicano tuvo a su
alcance el ‘hat-trick’ en una pena máxima que Guaita le detuvo. Ricardo Costa
marcó el tanto del honor para un conjunto valencianista poco preciso en ataque
y vulnerable en defensa.
Árbitro: Clos Gómez (Comité
aragonés). En el Villarreal C.F. amonestó a Jaume Costa (42´), Dorado (52´),
Pina (87´). En el Valencia C.F. mostró la amarilla a Banega (48´), Javi
Fuego (54´) y Canales (58´).
Datos: Encuentro de la
jornada 10 de Primera División disputado en El Madrigal ante 22.000
espectadores. Terreno de juego en buenas condiciones.
Se reflejó el
estado que vive cada uno. El Villarreal es alegría, gozo y más después del sufrimiento
hasta volver a Primera. Disfruta de su dulce momento y tiene a su merced la
mitad del colchón para sellar la permanencia. Aunque, viendo como está, hablar solo
de salvación se queda corto. Este equipo tiene fútbol como para soñar y por qué
no con la Champions. Un objetivo que persigue el Valencia desde que la Real
Sociedad le privara de él en la pasada campaña. Mucho tendrá que mejorar si
quiere alcanzarlo. Si en Villarreal se respira optimismo, en Valencia escepticismo.
Al contrario que su vecino, el conjunto de la capital del Turia se muestra deprimido,
con dudas y convive entre una de cal y una arena. Dichos factores, bastante
diferenciados en uno y otro, pesaron en la balanza del duelo. Otro aspecto
fundamental, la motivación. El Villarreal estuvo más enchufado e incentivado.
Le tenía ganas al Valencia por aquel empujón a Segunda de hace dos temporadas y
lo demostró. Se cobró la deuda en el campo.
Uche y Hernán
Pérez fueron las sorpresas de Marcelino en el once. Ambos respondieron con
goles, los dos primeros. En el primero, en el 17´, el nigeriano se anticipó a
Mathieu para remachar un servicio de Giovani desde la banda izquierda. Cinco minutos
después, Cani sirvió un centro largo desde la izquierda al segundo palo que
Hernán Pérez ajustó de certero cabezazo por el palo corto. Encajar dos tantos
de manera tan seguida, un mazazo para el combinado de Djukic. El técnico serbio
le dio la alternativa a Fede, Canales y Bernat, premiándoles por su buen partido
ante el St. Gallen. Canales trazó buenos pases entre líneas que, sin embargo,
sus compañeros no agradecieron con desmarques. El centro del campo del Valencia
se vio superado por los Trigueros, Bruno y Cani. Los tres funcionaron como un
reloj. Bruno destruyendo y creando, Trigueros soltándola rápido y Cani
desequilibrando. Javi Fuego no tuvo su mejor día y Banega, nuevamente
desaparecido. En el primer tiempo, el Valencia tuvo su mejor oportunidad para
reducir distancias en un cabezazo de Pabón muy manso, directamente a las manos
de Asenjo. El colombiano remató solo en el área pequeña, sin oposición, y no
conectó bien su remate.
Tras el descanso,
el Villarreal salió disparado a por el tercer tanto y lo consiguió. Antes de
llegar, en el minuto 46, Giovani cabeceó al palo un centro de Jaume Costa y
acto seguido Mathieu derribó a Uche. Clos Gómez decretó la pena máxima y Guaita
le adivinó el lanzamiento a Gio. Tres minutos después, este se redimió. Uche
remató un corner y el mexicano la cazó en la frontal del área chica de espuela al
fondo de las mallas. Detalle de crack. Tras el 3-0, el Villarreal dio un paso
atrás y apostó por el repliegue. El Valencia ganó más posesión, aunque sin crear
serio peligro debido a su lenta circulación. Sus acciones más peligrosas, a
balón parado. Así llegó su gol, obra de Ricardo Costa en el 63´ al cabecear un córner
botado por Parejo. Minutos después, la misma acción, solo que esta vez el
cancerbero evitó el tanto con un despeje providencial. A siete minutos del
final, sentenció el Villarreal. Bruno se la dio a Giovani, este caracoleó ante
Ricardo Costa y, desde la frontal, la puso por la escuadra. El ataque del
Villarreal exhibió su calidad y la retaguardia blanquinegra no supo cómo parar
las acometidas. Así se explica la goleada.
El Madrigal, que
registró un gran ambiente, celebró con muchas ganas el 4-1 al Valencia. El
próximo jueves nueva cita ante el Getafe en casa. Los che, por su parte, reciben
en Mestalla al Almería. Oportunidad para olvidar este varapalo.
Una de las cosas que se
dijeron en Villarreal cuando se ascendió es que se iba a jugar de nuevo ante el
Real Madrid, el Barcelona y el Valencia. Dicho duelo es uno de los más esperados
por la afición y de los más deseados de jugar por los jugadores. Poco queda de
la ‘germanor’ inicial. La rivalidad predomina en el ambiente de un derby que
llega subido de temperatura. En la retina, aquel partido de Mestalla de la
penúltima jornada de hace dos temporadas. El Submarino necesitaba un punto para
salvarse y lo tenía, hasta que el gol de Jonas en el descuento invocó a todos
los demonios. Aunque se quiera borrar el mal recuerdo, este siempre tiene su dosis
de protagonismo y ahí está, vivito y coleando. La victoria ayudaría al
Villarreal a desterrarlo, le permitiría amarrar la cuarta plaza y dejar al
Valencia a 7 puntos. El conjunto che no quiere entrar en esta batalla. Sabe que
debe dedicarse a jugar, a mejorar para reducir los 4 puntos que le separan de
su rival. De ello depende quedarse a un punto de la zona Champions.
El
Villarreal se acoge a su poderío en El Madrigal
Después de caer (2-0) en San
Mamés, ha de arreglar en casa lo que se deja fuera. Ante el Espanyol ya lo hizo
tras sufrir su primera derrota en el Villamarín y, ahora, persigue idéntico
camino. La perspectiva de conseguirlo puede considerarse alcista si se tiene en
cuenta su bagaje como local. Tres victorias y un empate, sin conocer la derrota
en los cuatro duelos disputados. El Villarreal se siente fuerte en El Madrigal
y quiere demostrárselo al Valencia. Getafe y Athletic, –quinto y sexto, a un
punto del Submarino– están al acecho, por lo que el triunfo se antoja una
garantía infalible con tal no bajarse del cuarto puesto.
Dar
un golpe en la mesa para ser aspirante a Champions
Al Valencia le ha venido de
perlas la manita (5-1) al St. Gallen en la Europa League. Ante todo, para
recuperar parte de la autoestima perdida por el traspié (1-2) ante la Real
Sociedad del sábado pasado. La escuadra de la capital del Turia necesita
desterrar las dudas, algo que pasa por rubricar una buena racha. El ‘proyecto
Djukic’ persigue una progresión ascendente de resultados para convencer a una
afición que demanda no fallar en las citas exigentes, como las de El Madrigal.
Al respecto, Djukic lanza un claro mensaje: “Hay que dar un golpe en la mesa
para ser aspirante Champions”. El técnico serbio desvela que la estrategia para
alcanzar la meta propuesta pasa por plantear un cuerpo a cuerpo por la
iniciativa: “Si sales a especular, el Villarreal te gana. Tenemos que mandar,
tener carácter y orgullo”.
Bruno
no se lo pierde
Bruno iba a perderse el
derby por la rigurosa roja que vio en San Mamés. El Comité le ha quitado la
segunda amarilla, por lo que el Submarino puede contar con su buque insignia.
Además, Bruno es como un talismán ante el Valencia. De hecho, en los duelos en
El Madrigal con el de Artana sobre el campo, el Villarreal no conoce la
derrota: 3 victorias y 2 empates. Marcelino tiene perfilado su once y mantiene
la duda en varios puestos. Trigueros o Pina en el doble pivote, mientras que
para acompañar a Giovani se perfilan dos opciones: seguir contando con Jony o
dar entrada a Uche o Perbet. Se caen de la citación Jokic y Farinós por lesión,
además de Moi Gómez y Gabriel por decisión técnica.
Djukic
deja fuera a Paco Alcacer por decisión técnica
Pese a que los suplentes se
reivindicaron en la Europa League, Djukic va a seguir apostando por un once similar
al que cayó en Liga. Banega, Guardado y Feghouli, que descansaron ante el St.
Gallen, apuntan a la titularidad al igual que Diego Alves, que volvería al arco
tras superar su lesión. También va a recuperar su sitio en el eje de la zaga,
Ricardo Costa, ausente ante la Real Sociedad. Djukic se ha dejado en Valencia a
Paco Alcacer, una decisión que sorprende debido al buen rendimiento del
canterano en los últimos partidos. Junto a Alcacer, causan baja Piatti y Míchel
por decisión técnica. Completa la lista de ausencias Barragán, aquejado de una
contractura que ya le impidió estar ante el St. Gallen.
El fútbol es
para los argentinos un sentimiento que nace con el primer llanto y muere con el
último aliento de vida. Se lleva en la sangre, te transforma y te invade de ese
amor incondicional por el club y por la Selección que no tiene explicación. Es
entonces cuando el corazón se hace dueño de la razón y uno se rinde a sus pies.
A partir de
allí forma parte de tu vida. Está en cada transmisión de radio, en la
televisión, en los periódicos, en las bromas a los rivales, en las discusiones
con amigos y principalmente en los potreros donde se forjan las ilusiones de
miles de chicos que sueñan jugar en la
primera división de Argentina, en la Selección Nacional y por supuesto tener el
privilegio de ir un Mundial.
Existe un
hombre que una vez siendo niño hizo un pacto de amor incondicional con una
pelota de fútbol. Vivió y creció para cuidarla y mimarla tratándola con respeto
y devoción. El día que colgó definitivamente los botines dijo una frase que
sintetizó toda su carrera futbolística: “El fútbol es el deporte más lindo y
sano que existe en el mundo. Eso no le quepa la menor duda a nadie. Porque se
equivoque uno no tiene que pagar el fútbol. Yo me equivoqué y pagué. La pelota
no se mancha.”
Ese hombre se
convirtió en leyenda viva del fútbol argentino. Con él se despertó la ilusión
de un país futbolero que lloró con aquél gol increíble a los ingleses en el
Mundial 86 y volvió a llorar de pena y rabia en el Mundial 94 cuando un control
antidoping “le cortó las piernas a Dios”.
Vídeo: Maradona y los Cebollitas
LOS COMIENZOS DEL “DIEZ”
Toda historia
tiene un principio y esta empezó en Villa Fiorito, un barrio marginal de Buenos
Aires. Un 30 de octubre de 1960 nació un niño llamado Diego Armando Maradona,
el quinto hijo y primer varón de una modesta familia
“En una Villa
nació, fue deseo de Dios, crecer y sobrevivir a la humilde expresión enfrentar
la adversidad con afán de ganarse a cada paso la vida.”
Siendo muy
niño el “Pelusa” como le conocían en el
barrio, se hizo famoso por su habilidad con la pelota ya que podía hacer
malabares increíbles con ella sin permitirle tocar el suelo. Esta virtud fue
solo el comienzo de todo lo que tenía reservado para el futuro.
Su primer
equipo se llamó “Estrella roja” creado por don Diego, su padre para que los
niños del barrio se divirtieran y allí
empezó a marcar diferencias.
Un día tuvo
la fortuna de enfrentar al equipo “Tres banderas” máximo rival de la Villa
donde jugaba Gregorio Carrizo un nueve de área y gran definidor .Goyo fue
primero su rival y después compañero de clase para terminar siendo su amigo
inseparable y quien le animara a presentarse a una prueba en las divisiones
inferiores de Argentinos Juniors.
“En un
potrero forjó una zurda inmortal con experiencia sedienta ambición de llegar.
De cebollita soñaba
jugar un Mundial y consagrarse en Primera, tal vez jugando pudiera a su familia
ayudar.”
Se probó en
los cebollitas, equipo dirigido por Francis Cornejo quien con asombro le
preguntó si estaba seguro de tener diez años. “Uno pasa la vida entre pibes, esperando el
momento de encontrarse ante un jugador así. Y cuando ocurre es difícil de
creer. Cuando lo vi, me di cuenta de que estaba ante el broche de oro de mi
carrera de viejo entrenador. A partir de ese día, solo viví para Diego
Maradona”,
El paso por
las divisiones inferiores de Argentinos Juniors fue breve. El talento del
muchacho de Fiorito era tal que subió escalones rápidamente. Unos días antes de
cumplir 16 años, el 20 de Octubre de 1976 hizo su debut oficial en un partido
del Campeonato Metropolitano. Minutos antes de entrar al campo su entrenador
Juan Carlos Montes le dijo:” Vaya pibe, juegue como usted sabe y si puede, tire
un caño.” Y en la primera jugada donde
participó recibió el balón de espaldas a su marcador, le esquivó e hizo un regate
espectacular que dejó boquiabiertos a los hinchas.
Luís Galván,
zaguero de Talleres de Córdoba y futuro compañero en la selección Argentina del
78’ destacó: “Nosotros dominábamos claramente el partido hasta que ingresó
Maradona. A partir de allí todo cambió. Diego se puso el equipo al hombro y nos
fueron arrinconando en nuestra portería. Terminamos defendiéndonos pero
ganamos. No podíamos creer lo que hacía ese chico con una inmensa melena llena
de rulos.”
La gente
empezó a comentar que en la cancha de tablones “de los bichos de la Paternal”
(hoy el estadio lleva su nombre y fue remodelado en 2003) jugaba un pibe que
volvía loco a los rivales así que nadie quería perderse semejante espectáculo.
Fue entonces cuando Argentinos Juniors comenzó a tener un lugar en el mundo
futbolístico, se hizo famoso y empezó a jugar partidos internacionales donde la
sola presencia de Maradona conseguía eclipsar a todo lo que había a su
alrededor.
El equipo
consiguió su primer subcampeonato Metropolitano de primera división en 1980 y
Diego se convirtió en el máximo goleador del torneo con 25 tantos.
Vídeo: Maradona en Argentinos Juniors. Golazo al Loco Gatti
SU PRIMERA LLEGADA A BOCA JUNIORS
Los xeneizes
habían tenido un mal campeonato en 1980 en los dos torneos mientras River Plate
su eterno rival obtenía su segundo tricampeonato algo que hacía mucho daño. En
las elecciones internas del club, Martín Benito Noel llegó a la presidencia con
la difícil misión de encontrar un revulsivo que devolviera a Boca Juniors la
honra deportiva.
Su primera
misión fue contratar a Silvio Marzolini y renovar el plantel con grandes
jugadores como Miguel Brindisi, Marcelo Trobbiani, Osvaldo Escudero, Carlos
Morete, Roberto Passucci y la figura codiciada por todos, el joven Diego
Maradona.
“A poco que
debutó Maradó, Maradó, la 12 fue quien coreó Maradó, Maradó su sueño tenía una
estrella llena de gol y gambetas.”
En el año
1981 Diego Maradona llegó a préstamo a Boca Juniors. Ese préstamo costó 4
millones de dólares con opción de compra por otros 4 millones netos para
Argentinos Juniors.
El pase del
mejor jugador del momento derivó en una novela de terror. Boca Juniors se
endeudó y para aminorar el pago elaboró un paquete de jugadores que pasaron a
la Paternal: el portero Osvaldo Santos, el defensor Miguel Ángel Bordón, los
mediocampistas Mario Sanabria y Carlos Salinas y el delantero Carlos Randazzo.
Fueron
reuniones interminables con idas y vueltas. La presión del presidente de
Argentinos Próspero Cónsoli llegó a límites extremos. La hinchada no estaba
conforme con la venta de su estrella y empezó a demostrarlo con amenazas a sus
dirigentes, incendiando diez tablones del estadio y construyendo una horca con
el nombre pintado del presidente. Por suerte la sangre no llegó al río y el
pase se concretó.
A pocos días
de haber firmado su contrato hizo su presentación oficial frente a Talleres.
Otra vez el equipo cordobés en su camino pero con un resultado muy diferente.
Boca ganó 4 a 1 y Maradona convirtió dos goles.
La relación
con el míster Silvio Marzolini fue uno de los problemas mayores en su romance
con Boca situación que se repetiría en el tiempo con otros entrenadores. Maradona
no soportaba largas concentraciones ni entrenamientos exigentes ya que estaba acostumbrado a las libertades que
gozaba en Argentinos y cualquier cambio le era difícil de asimilar.
El equipo de
Marzolini hizo un buen torneo pero su momento glorioso llegó el 10 de abril en
el primer superclásico que disputara Maradona ganando por 3-0 con una obra
maestra de gol dejando al portero Fillol por los suelos y al defensor Tarantini
fuera de juego con sus gambetas y amagues imposibles.
Maradona
consiguió así el único título con la azul y oro convirtiendo 17 goles. “En el
81 era un chico que ya era un gran jugador y él lo sabía. En el interior del
país pagaban 120 mil dólares por cada partido amistoso para verle jugar”
recordó el entrenador.
En el Torneo
de Verano del 82, Maradona se despidió de Boca antes de concentrarse con la
Selección Argentina para el Mundial de España. Al finalizar el año volvió a
Argentinos ya que no se pudo hacer opción a su compra. En medio de un reclamo
judicial el Barcelona ofreció 8 millones de dólares, 6 millones para el club
que le vio nacer y 2 millones para el que le hizo famoso.
Su primera
etapa en Boca Juniors se cerró con 40 partidos y 28 goles.
Vídeo: Maradona y el Metropolitano 81 con Boca Juniors
SU PASO FUGAZ POR NEWELL´S OLD BOYS
Maradona
volvió al fútbol argentino en 1993 después de ocho años, diez meses y ocho días.
Su paso por Newell´s fue fugaz despertando más expectativas de las que pudo
ofrecer pero dejando una huella imborrable en los corazones de sus hinchas.
La historia
con el equipo rosarino comenzó cuando su ex compañero en Argentinos, Ricardo
Giusti viendo un partido de Newell´s desde la grada aburriéndose mucho comentó:
“este club necesita un golpe de efecto. Yo conozco a la única persona capaz de
dárselo.” Y desde ese día ayudó para que la ilusión se convirtiera en realidad.
Aquél 13 de
septiembre de 1993 la ciudad de Rosario se revolucionó. El parque Independencia
se vistió de lujo y tuvo vida propia. Treinta mil personas pudieron ver como
Maradona, el máximo ídolo del fútbol argentino, se vestía con los colores rojos
y negros el día de su gran presentación en la primera práctica con el plantel
que dirigía el Indio Solari.
Sus
compañeros (entre ellos estaba Gerardo “Tata” Martino, actual entrenador del FC
Barcelona) le escoltaron en la salida de la manga, mientras recibía la ovación de un público que
explotaba de felicidad. El más ilustre de los “canallas (apodo del equipo de
Rosario Central), el Negro Fontanarrosa dijo respecto a su fichaje “Lo de
Maradona en su enunciación pareció que iba a ser muy grave. Y después casi
resultó una broma al revés. Es como si el más encarnizado de tus vecinos se
compra un Rolls Royce, te mató. Y después no lo puede sacar del garaje.” Maradona se puso en forma bajando 12 kilos y el 7 de octubre se presentó en un partido amistoso ante el Emelec de Ecuador. Oficialmente, lo hizo el día 10 perdiendo por 3-1 contra Independiente de Avellaneda como visitante. También enfrento a Belgrano, Gimnasia y Esgrima de la Plata, Boca Juniors y Huracán antes de sufrir un desgarro muscular.
Tras el
alejamiento del Indio Solari, llegó Jorge Castelli para dirigir al equipo. La
relación con el nuevo entrenador no fue buena y terminó con la salida polémica
del club.
Vídeo: Presentación de Maradona con Newell´s Old Boys
SU REGRESO A BOCA JUNIORS, LA DESPEDIDA
La suspensión
de 15 meses por el doping positivo en el Mundial de 1994 fue durísima para
Diego. Con una larga inactividad futbolística a sus espaldas y 36 años el
“diez” regresó a Boca Juniors para despedirse.
Maradona
soñaba con ser jugador y entrenador pero esa idea no prosperó y debió
conformarse con volver a estar a las órdenes de Silvio Marzolini. El ansiado
retorno fue el 30 de septiembre de 1995 en el marco de un amistoso
internacional ante la Selección de Corea con una victoria por 2 a 1. La dupla que supo formar en el Mundial 90 con Claudio Caniggia no prosperó en el Torneo Apertura y se sustituyó al entrenador, reemplazándolo por Carlos Bilardo, quien provocó malestar en Maradona. Diego, en un principio, se opuso a la contratación del hombre con quien había tenido una dura disputa en el Sevilla.
Tras limar
asperezas con el entrenador, el equipo de Bilardo y Maradona fue un serio
candidato a ganar el Torneo Clausura del 96’ pero una sorpresiva derrota ante Racing
Club de Avellaneda impidió tal logro. Ese año hizo su debut Juan Román
Riquelme.
“La fama le
presentó una blanca mujer de misterioso sabor y prohibido placer, que lo hizo
adicto al deseo de usarla otra vez involucrando su vida. Y es un partido que un
día el Diego está por ganar.”
El 11 de
agosto de 1996 se despidió del fútbol por 11 meses para internarse en Suiza
para seguir un tratamiento por su adicción a las drogas. En abril de 1997 firmó
su último contrato futbolístico como jugador regresando otra vez a Boca. Ese
año se incorporaron jugadores que a posteriori serían figuras: Martín Palermo,
los mellizos Gustavo y Guillermo Barros Schelotto, Walter Samuel y los
colombianos Jorge Bermúdez y Oscar Córdoba.
Tres meses
después de su último retorno volvió a aparecer el fantasma del dopaje y ante la
presión mediática decidió poner punto final a su carrera de jugador profesional
el 25 de Octubre de 1997.
“Dicen que un día, un Dios se hizo
brisa para pasear por Fiorito. Y entró en una casilla, donde la puerta no
cerraba bien. Allí dormía un chico con el pie izquierdo destapado.”
Muchas veces en la
profesión periodística cometemos el error de ensalzar siempre al jugador,
entrenador o equipo que ha salido vencedor. En el caso de mi parcela, el MVP
semanal suelo dárselo a un jugador que ha logrado la victoria en esa jornada.
Creo que es de justicia reconocer el merito que en esta contienda liguera ha
tenido el cancerbero argentino del Málaga, Willy Caballero, pues gracias a su
actuación, mantuvo a su equipo metido en el partido frente al Real Madrid, en
donde perdieron por 2-0. Todo un recital de paradas que llegaron a desesperar a
Cristiano Ronaldo, quien descontento con su actuación y frustrado por las
intervenciones del meta malaguista, llegó a pedir perdón a la hinchada merengue
por su mal partido.
Con esta actuación,
Caballero se confirma como uno de los mejores metas de Primera y muchos
argentinos aún se siguen preguntado la razón por la que no defiende el marco de
la selección argentina, pues creo que es demasiado evidente, que a día de hoy,
es el mejor arquero argentino en la actualidad.
Ha sido una jornada muy
aburrida, con pocos goles, como casi todas las que llegan después del parón de
las selecciones. Antes de entrar a los tres primeros clasificados, destacamos
los goles de falta del rayista Gálvez y del vallisoletano Ebert, que les
sirvieron a sus conjuntos para sumar puntos.
Una nueva victoria de
un Elche en estado de gracia, el ya mencionado en otras crónicas idilio del
Bilbao con el nuevo ‘San Mamés’ o la cuarta victoria consecutiva del Getafe,
quinta en los seis últimos partidos o una nueva derrota de un Celta que no
cuaja con el estilo de Luis Enrique han sido otros de los hechos destacados del
fin de semana.
Respecto a los tres
primeros de la Liga ha sido una jornada de sorpresas, pues tanto Barça como
Atlético de Madrid pincharon, lo que permite al Madrid recortar puntos y que
haya sido una jornada redonda.
El Atlético perdió el
primer partido del curso frente a un buen Espanyol, que tuvo una dosis de
fortuna en el gol, pues fue el propio guardameta colchonero, Courtois, quien
introdujo el esférico en su meta. Se vio a un conjunto rojiblanco muy cansado,
evidentemente, el Virus FIFA le ha pasado factura.
Por su parte, el Barça
no paso del empate en el siempre complicado estadio de ‘El Sadar’, donde
Osasuna cuajo un gran partido gracias a un sensacional planteamiento de su
técnico Javi Gracia. ¿Quién fue el lumbreras que le dejo escapar del Almería?
Como ya es costumbre, algunos jugadores culés se quejaron del césped y de que
no se protegió a Mermar, en fin, las pamplinas de siempre cuando no ganan, ya
no sorprende a nadie.
Y por último, el Real
Madrid cuajo un buen partido ante el Málaga, al que no goleó por la ya
comentada estelar actuación de su portero. Vaticinó Ancelotti que iban a ir a
más porque no se podía jugar peor. Al menos vemos que el italiano es un
autentico cachondo y tiene sentido del humor. Ahora sólo le hace falta saber
algo más de fútbol, pero como todo en el fútbol y en la vida, el tiempo lo
dirá.
Luis Alberto Reyes Almansa
Periodista Deportivo Redactor Liga BBVA MotivaGoal Twitter: @LuisAlbReyes
El Valladolid y el Sevilla firmaron
las tablas en el José Zorrilla en un partido controlado por los de Emery. Tras
ponerse 0-2 en el marcador, los de Emery parece que iba a ganar fuera tras más
de un año sin hacerlo, pero el Valladolid remontó y salvó un punto.
2- Valladolid: Mariño; Rukavina, Valiente, Rueda, Peña; Ebert, Baraja (Rubio, min. 67), Rossi, Bergdich (Manucho, min. 46); Omar (Rama, min. 67) y Guerra.
2- Sevilla: Beto; Cala, Nico Pareja, Navarro; Diogo, Iborra, Carriço, Alberto Moreno; Vitolo, Jairo (Perotti, min. 77) y Bacca (Gameiro, min. 79).
Árbitro: Prieto Iglesias, del colegio navarro Amonestó a Cala (m. 5), Rossi (m. 20), Carriço (m. 35), Bacca (m.53).
Incidencias:Partido correspondiente a la novena jornada del Campeonato de Liga de Primera División, Liga BBVA, celebrado en el Estadio José Zorilla ante 13.706 espectadores.
Un
gran ejercicio de defensa, de
tres jugadores y acompañada de cuatro en la medular, durante gran parte del partido parecía terminar con el gafe del conjunto
visitante, que se hizo con el
esférico desde su inicio. Un gol en el minuto 2 del colombiano, Bacca, trastocó los planes de Juan Ignacio Martínez. A partir de ahí, el Valladolid inquietó la meta de Beto con varias llegadas desde la izquierda que no encontraron al arco contrario.
El Sevilla se hizo dueño
del partido y dominó en todo momento, siendo el recién debutante con la
selección española absoluta Alberto
Moreno quien se animó y
logró a la media hora de partido el segundo tras recoger un balón suelto.
Tras el descanso, el técnico del Valladolid sacó al
delantero Manucho para tener más potencia en el ataque. Los locales
intentaron fabricar más
fútbol y trataron entrar más por las bandas y así poner en apuros a los
sevillanos. Al final, el Valladolid tuvo su recompensa. Manucho, en el minuto 81, puso el 1-2 con un gran remate de cabeza y Ebert estableció la igualada en el minuto 84 a raíz de un golazo de falta. El Sevilla ya no fue capaz de reaccionar.
Un país de 3,8 millones de
habitantes vivió ayer su día más feliz, futbolísticamente hablando, de sus 20
años de existencia. Bosnia-Herzegovina está de fiesta y no es para menos. Disputará, por primera vez en su historia,
una Copa del Mundo. Certificó su clasificación directa tras vencer (0-1) en
Lituania con un gol de Ibisevic, lo que le ha valido la primera plaza de su
grupo. Los ‘dragones’ han acabado empatados a puntos (25) con Grecia, a la que
han superado en el gol average por un tanto de diferencia.
En las dos ediciones
anteriores, Bosnia ya rozó el pase a una fase final de una Copa del Mundo. En
Alemania 2006, se quedó a falta de un triunfo para acudir. En Sudáfrica 2010, fue
apeado por Portugal en la repesca. A la tercera, le llegó la vencida. La
insistencia se ha visto premiada, al igual que la progresión ascendente que ha
experimentado dicho combinado, a partir de la irrupción de sus figuras.
El potencial bosnio se
encuentra de tres cuartos de cancha hacia delante. Allí emergen sus cuatro jugadores
más destacados. El principal, Edin Dzeko.
El delantero del Manchester City ha aprovechado su facilidad para armar el
remate y ha acabado como el máximo goleador de los ‘dragones’ en la fase de
clasificación con 10 tantos. Le sigue de cerca su homólogo en el ataque, Ibisevic, con 8 tantos. Dzeko e Ibisevic
forman una dupla muy peligrosa que se beneficia de la creatividad de Pjanic y Misimovic. Ambos aportan el
último pase, dan criterio a la circulación y, además, ven puerta con relativa
facilidad.
Gran
celebración
La fiesta por la histórica
clasificación empezó en el estadio de Kaunas, donde un buen número de
seguidores se desplazaron para alentar a los suyos. En Sarajevo, capital de
Bosnia, unas 30.000 personas siguieron el partido en una pantalla gigante. La
culminación llegó en las celebraciones posteriores al choque. La Selección hizo
su paseo triunfal en un autobús descapotable por las calles de Saravejo. Unas
100.000 personas acompañaron a sus ídolos al grito de: “Haj'mo Bosno, haj'mo
Hercegovino!” (“¡Vamos Bosnia, vamos Herzegovina!”). Fiesta máxima en Saravejo
y en todos los puntos del país.
La Selección cierra la fase
de clasificación con una victoria (2-0) ante Georgia que certifica su presencia
en el Mundial. Tal y como se esperaba, España fue ampliamente superior a
Georgia y, además, mejoró ostensiblemente el nivel de juego con respecto al
pasado viernes. Tocó rápido, buscando los espacios y entrando por las bandas.
Así echó abajo la muralla georgiana. La primera mitad, brillante. En la segunda,
aunque bajó un ápice la intensidad, ‘La Roja’ controló la situación. Negredo y
Mata pusieron su firma en los dos tantos, que pudieron ser más ya que España
dispuso de un amplio abanico de ocasiones claras como para firmar la goleada. De
todos modos, las formas importan y hoy España sí convenció.
Cuchillos
en las bandas
Acertó Vicente Del Bosque
con la alineación. Hizo 6 cambios respecto al once que alineó ante Bielorrusia.
Entraron Casillas, Juanfran, Alberto Moreno, Navas, Iniesta y Negredo. Se
cayeron Valdés, Arbeloa, Monreal, Cesc Fàbregas, Silva y Michu. El principal
acierto del seleccionador estribó en apostar por extremos puros, algo esencial
ante rivales tan cerrados como Georgia. Navas y Pedro fueron de los más
destacados, volviendo locos a los laterales con su desborde y profundidad.
Juanfran y Alberto Moreno les acompañaron a la perfección. Más que laterales,
ejercieron también de extremos, doblando las opciones de entrar por los costados.
Ambos tuvieron una notable actuación. Mención especial para el lateral
izquierdo del Sevilla, que debutó hoy con la Absoluta a sus 21 años. Cuenta con
un futuro brillante.
Todos
los jugadores rallaron alto
Realmente, ‘La Roja’ al
completo estuvo a un gran nivel. Iniesta dio una lección de visión de juego en ‘su’
Albacete. Del Bosque lo sustituyó a 10 minutos del final y el Carlos Belmonte
se puso en pie para darle una atronadora ovación. Xavi, como siempre, dio
salida y no erró prácticamente ningún pase. Negredo se mostró muy incisivo. Marcó
el primer tanto en el minuto 25 al culminar un servicio de Iniesta, tras una
gran pared entre el manchego y Pedro. A parte del tanto, dispuso de más
ocasiones como para haber aumentado su cuenta particular. La más destacada, un
precioso remate de chilena que desbarató el meta Kvaskhvadze. De haber entrado,
estaríamos ante uno de los goles del año. Defensivamente, España no pasó
excesivos apuros. Georgia si dispuso de una ocasión muy clara en la primera parte,
en la que Gelashvili le ganó la espalda a Ramos por velocidad. Casillas, que
volvió a ser titular, evitó el empate.
España
perdonó la goleada
Mata cerró la cuenta
goleadora al aprovechar un balón dividido. Salió al rectángulo de juego en el
minuto 60, reemplazando a Pedro. Tres minutos después marcó en su primer remate
a puerta. De ahí hasta el final, España pudo redondear el partido en goleada,
pero la cuenta ya no se movió. A mejorar, si acaso, la efectividad. Lo demás,
España lo hizo perfecto ante una Georgia que apostó por tres centrales para
frenar el potencial ofensivo de los de Del Bosque. El combinado caucásico llegó
a Albacete con bajas importantes y dio la cara, mostrando un buen nivel
defensivo. Prácticamente, no se asomó en el ataque. Tampoco le da a más ante
una selección como la española. Jugó a no salir goleado y lo logró.
España, por lo tanto, defenderá su cetro en Brasil 2014. En
el país con más Mundiales, buscará su segunda Copa del Mundo.