Reparto de puntos amargo de cara a las aspiraciones de Villarreal y
Betis. El Submarino se queda a 6 puntos de la Champions. El conjunto
verdiblanco cuenta con una jornada menos y la misma distancia respecto a la
salvación, 11 puntos. Aun así, tal y como hoy demostró, no se da por vencido y
va a dejarse hasta la última gota de sudor para revertir una situación ya de
por si casi insalvable. Combatió a las bajas y al cansancio con una notable
capacidad de sacrificio que maniató a un Villarreal gris y ramplón. El
Submarino se adelantó en el minuto 70, merced a un polémico penalti
transformado por Bruno. Las tornas cambiaron con la rigurosa expulsión de Uche
a diez minutos del final. A partir de ahí, el Betis se vino arriba y Rubén Castro
empató en el minuto 84. Aún dispuso el Betis de tres ocasiones más para haber
dado la vuelta a la tortilla pero se estrelló con Asenjo, al igual que también
el Villarreal se topó con Adán en una clarísima que tuvo al final. Óliver Torres
dejó patente su calidad en su debut con el Submarino.
1- Villarreal C.F:
Asenjo; Mario, Gabriel, Pantic
(Trigueros´66), Jokic; Moi Gómez, Pina, Bruno, Nahuel (Oliver Torres´46);
Giovani, Perbet (Uche´46).
1- Real Betis Balompié: Adán;
Amaya, N´Diaye, Jordi; Juanfran (Juanma´75), Nono (Braian´83), Salva Sevilla,
Dídac Vilá; Baptistao (Chica´56), Rubén Castro, Cedrick.
Goles: 1-0
Bruno (p) min.70, 1-1 Rubén Castro min.84.
Árbitro: Iglesias
Villanueva (Comité gallego). En el
Villarreal C.F. expulsó a Uche (79´) y (62´). Además, amonestó a Jokic (79´).
En el Real Betis Balompié mostró la amarilla a Dídac Vilá (44´), Salva Sevilla
(52´), Amaya (67´), Chica (69´).
Datos:
Encuentro de la jornada 26 de Primera División disputado en El Madrigal ante
20.000 espectadores. Terreno de juego en perfectas condiciones.
Solo los últimos 30 minutos valieron la pena. Los 70 primeros, un
tostón. Aunque peor fue la primera parte. Muy aburrida y carente de ritmo, pese
a que el partido empezó con una intensidad engañosa que se diluyó conforme
avanzó el crono. La posesión estuvo repartida, con dominio alterno. El
balón, sin embargo, rodó a un ritmo lento. En esta tesitura, las defensas se
impusieron a los ataques y las ocasiones claras brillaron por su ausencia. Los
centros desde las bandas de Moi Gómez y Nahuel se encontraron con la poblada
defensa verdiblanca. Calderón trazó un 3-4-3 que dificultó las transiciones enemigas.
Los carrileros se transformaron en defensas cuando el Betis defendía, dando
lugar a una retaguardia compuesta por cinco hombres. Cuando se atacaba ejercían
de extremos, obligando a ir por dentro a Cedrick y Baptistao. La primera mitad
solo nos dejó una acción medianamente destacable, un disparo de Perbet desde fuera
del área que se topó con Adán. El Betis lo intentó con pases largos que no
superaron a la defensa de circunstancias del Villarreal. Con Dorado, Iñiguez y
Musacchio (baja de última hora) lesionados, Pantic hizo de central junto a Gabriel.
Marcelino terminó el partido con Bruno como central.
Penalti que no era y expulsión injusta
La salida de Óliver tras el
descanso le dio más profundidad al Villarreal. El extremeñó dejó una grata impresión
en sus primeros minutos con la casaca grogueta. Aportó fluidez y, ante todo, exhibió
su calidad con pases inverosímiles de esos que solo son capaces de ejecutar los
genios. A Uche y Giovani les fabricó dos goles que estos desperdiciaron. El
nigeriano la mandó al limbo y el mexicano se encontró con un providencial Adán.
El Villarreal, en la segunda mitad, experimentó una mejoría y controló la
situación hasta la expulsión de Uche en el minuto 79. El nigeriano dejó a los
suyos con inferioridad y provocó un penalti, que por cierto, no era. El
nigeriano se cae ante Chica, pero el central no le toca. Iglesias Villanueva
picó y Bruno estableció el 1-0 en el minuto 70. Luego el colegiado cometió otro
error crucial expulsando a Uche al recibir el nigeriano dos amarillas en apenas
veinte minutos. La segunda tarjeta que propició su expulsión vino precedida por
una falta que no era tal, ya que el delantero tocó balón.
El Betis rozó el triunfo en la recta final
Dicha acción propició que el
Betis se viniera arriba y encontró el premio del gol en el minuto 84. Dídac centró
desde la izquierda y Rubén Castro cabeceó al fondo de las mallas, superando en
el salto a Bruno y Jokic. Después del 1-1, el partido se rompió y se
contabilizaron hasta cuatro ocasiones claras. Tres de ellas béticas. Braian y Jordi
no vieron puerta por centímetros. Asenjo evitó el 1-2 en un cabezazo a
bocajarro de N´Diaye. El Villarreal tuvo la suya en un pase magistral de Óliver
que dejó a Giovani solo ante Adán. El portero salvó el gol en un acto de
reflejos. Con el pitido final, algunos jugadores del Betis terminaron tendidos
sobre el rectángulo de juego, conscientes de que habían tenido la victoria en
la recta final. Al Submarino se le aleja la Champions y se centra en mantenerse
en Europa League.
Manuel Monfort Marzá
Editor Ejecutivo - MotivaGoal
manuel.monfort@motivagoal.com
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