Luis Suárez emocionó a
Uruguay y al mundo entero.
Llegó al Mundial operado de
menisco. Se recuperó a marchas forzadas y forzó ante Inglaterra por lo mucho
que había en juego. Jugando al 50%, marcó dos chicharros que dejan a Uruguay bien
encaminada a octavos y a Inglaterra casi eliminada.
Es lo que tienen los cracks.
Aun estando lejos de su tope, son decisivos. Vimos un Suárez que suplió sus
carencias físicas con lo que siempre ha caracterizado a la ‘celeste’, garra y
competitividad. A este abanico le añadió su sello personal: colocación,
velocidad, calidad y olfato de gol. En Liverpool, donde tantas veces han
celebrado sus goles los ‘reds’, anoche le lloraron. Suárez se bastó para decidir
el partido.
El mérito de Suarez hay que
atribuírselo en su justa medida a Cavani. Otro delantero top (¡vaya pareja
tiene Uruguay!) que no duda en coger pico y pala. Anoche trabajó a destajo
bajando a defender: recuperó balones, hizo coberturas, achicó espacios. Todo
ello para ahorrarle esfuerzos a Luis Suárez, liberándolo del trabajo sucio. Así
‘el pistolero’ estuvo más fresco y se centró únicamente en las tareas ofensivas
gracias a la solidaridad del ‘killer’ del PSG.
Luis Suárez aguantó
estoicamente hasta casi el final del partido y, cuando fue sustituido, se le
vio emocionado. En esos momentos hasta el pitido final se le vendrían muchas
imágenes a la cabeza: la lesión, el temor a perderse el Mundial, la inesperada
derrota ante Costa Rica, la milagrosa recuperación, el temor a una recaída…
Cuando pitó el árbitro todo se esfumó y brotó la alegría a raudales. Porque
después de los obstáculos que tuvo que superar para estar ahí, lo decisivo que
fue.
Luis Suárez –Bota de Oro
junto a Cristiano Ronaldo– ha sido el mejor jugador de esta temporada por delante
de Cristiano y Messi. El charrúa abanderó a un Liverpool que tuvo la Premier en
la mano después de muchos años. Mérito enorme al sobreponerse durante casi toda
la temporada a los principales favoritos. Solo el City superó a un Liverpool
que mereció ganar la liga inglesa. La próxima temporada será difícil que siga
contando con su estrella. Actuaciones como las de anoche no hacen sino subir la
cotización del mejor delantero del mundo. Objetivo de deseo de Real Madrid y
Barcelona, entre otros. Le quieren todos los grandes, pero ojalá le veamos en
la liga española perforando las redes contrarias.
Mientras tanto, Luis Suárez tiene
un último partido para sellar la clasificación ante Italia. Otro rival temible,
más si cabe que Inglaterra. El ‘pistolero’ espera a la ‘Azzurra’.
Manuel Monfort Marzá
Editor - MotivaGoal
manuel.monfort@motivagoal.com
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