Diego Pablo Simeone González (Buenos Aires, 28 de Abril de 1970). Considerado un héroe
por los aficionados rojiblancos, el ‘Mesías´ de la parroquia colchonera.
Su hazaña en el conjunto de la Ribera del Manzanares, va más
allá de lo épico. Pocos se imaginaban que el mismo equipo en el que gobernaba
la apatía y la desmotivación dirigidos
por Gregorio Manzano, pudiese llegar a convertirse en un equipo serio,
infranqueable en defensa y arrollador desde que el Cholo Simeone se hizo cargo
del equipo.
Y es que el argentino es un líder y motivador nato. Suyas
son las frases marcadas en la mente de
los jugadores que dirige, e incluso de los mismos aficionados del club madrileño, que tratan de
extrapolar a su vida diaria “el cholismo”. Frases tan legendarias, como: “Si se
cree y se trabaja, se puede”, “El
esfuerzo no se negocia”, o el famoso “partido
a partido”.
Simeone no busca florituras, ni el juego combinativo que en
ocasiones no llega a ninguna parte. El entiende que existen otras formas de
juego, que otras personas con mente cerrada, no entienden y que achacan en
ocasiones a juego poco agradable de ver o juego agresivo.
La forma en la que el argentino entiende el fútbol, forma parte de su filosofía “trabajo y sacrificio”.
Su estilo de juego es claro, basado en un sistema defensivo fuerte, marcado por
un juego intenso, aguerrido (que no sucio, las estadísticas lo
demuestran), directo, vertical y rápido en el que solo hay una obsesión “ LA VICTORIA”.
“El Cholo” ya marco una época como jugador rojiblanco,
formando parte del año del famoso doblete,
en el que su garra, carácter y liderazgo se hicieron notar. Ahora se ha
propuesto continuar engrandeciendo al club de sus amores, está batiendo y
marcando registros continuamente, desde que empezó su aventura como entrenador
rojiblanco.
Simeone ya es el tercer entrenador en la historia del
Atlético de Madrid con más victorias en la historia del conjunto rojiblanco.
Su próximo reto es superar al ex técnico Ricardo Zamora, con
85 victorias en liga con el conjunto rojiblanco, al que entrenó durante más de
cinco años. Mientras que aún se mantiene algo alejado Luis Aragonés, con 194 partidos ganados en la competición
doméstica.
Cuando Simeone era jugador, sus compañeros ya le veían como su
líder. Incluso en la penúltima etapa de Manzano, muchos de ellos hacían más
caso a lo que el argentino les decía, que al propio míster.
Muchos ya sabían que el bonaerense tenía madera de
entrenador, lo que pocos se imaginaban es que pudiese engrandecer la historia
del Atlético de Madrid, de forma tan contundente
y rápida.
Manuel Granda Vidal
Redactor del Atlético de Madrid
manuelgrandavidal@gmail.com