Alimentación y estado de ánimo


Diversas investigaciones han demostrado la relación entre el tipo de dieta y el estado de ánimo. En este sentido, es importante el papel que juega la serotonina como modulador del estado de ánimo.

“Somos lo que comemos” o “dime lo que comes y te diré cuan feliz eres”.  Inevitablemente, no pueden ser tan contundentes estas afirmaciones,  ni la relación entre estas variables es tan fuerte, pero si se puede afirmar que el tipo de alimentación que tomamos influye en nuestra vida. Igual que lo puede hacer la práctica de ejercicio físico, por ejemplo.

Uno de los aspectos en los que la alimentación influye en nuestra vida, es en el estado de ánimo.

Relación  serotonina, alimentación y estado de ánimo

La serotonina es un neurotransmisor (mensajero químico) relacionado, entre otras cosas, con el buen sueño y los estados de ánimo.

Se ha demostrado que las personas que tienen bajos niveles de serotonina cerebrales, pueden sufrir desajustes de personalidad, como tener más alta probabilidad de sufrir depresiones o alteraciones en los estados de ánimo.  

La serotonina se sintetiza a partir del triptófano. Pero el organismo no es capaz de sintetizar triptófano por el mismo, por lo que es indispensable ingerir alimentos que contengan triptófano.
Según María del Carmen Moreu Burgos (diplomada en nutrición,  farmacéutica y tecnóloga de los alimentos) para elevar los niveles de serotonina cerebrales, además de triptófano, es necesario ingerir ácidos grasos omega 3, magnesio y zinc.

Los alimentos ricos en triptófano, por tanto que elevan los niveles de serotonina, pueden ser las  carnes, pescados, leche, frutos secos, legumbres (soja) y  frutas (plátano, aguacate).

Alimentos como el germen de trigo, la levadura de cerveza,  las semillas, las legumbres  y el cacao  contienen buenas cantidades de magnesio, que nos ayudan a elevar los niveles de serotonina.

Pescados como el salmón, la caballa,  el arenque y las sardinas, así como las nueces, la soja y  las semillas de lino,  aportan ácidos grasos omega-3.

Una dieta inadecuada, puede bajar los niveles de serotonina drásticamente.

También, una disminución drástica de la ingesta de hidratos de carbono,  puede hacer bajar los niveles de serotonina, así como el consumir ciertas drogas, como alcohol o cafeína.


Por el contrario, una alimentación variada y equilibrada, realizar ejercicio físico, dormir las horas adecuadas y adoptar un enfoque positivo ante la vida, serian importantes, para mantener los niveles de serotonina.



Manuel Granda Vidal
Redactor del Atlético de Madrid
manuelgrandavidal@gmail.com


Twitter Delicious Digg Stumbleupon Favorites More