El Villarreal logró más que una victoria. Derrocó a la bestia negra de la pasada temporada, recuperó las buenas sensaciones dejando atrás una mala racha de tres partidos sin ganar. Y lo más importante, se afianza en Europa y deja al Sevilla a 8 puntos. Quitando el último cuarto, el 'submarino' fue superior y lo plasmó con una ventaja de 2-0 (goles de Mario y Bakambu) que parecería dejar el partido sentenciado. Pero con el gol de Llorente apareció el orgullo del Sevilla que, jugando con diez por la lesión de Gameiro, pudo empatar.
2- Villarreal CF (4-4-2): Areola; Mario, Eric Bailly (Bonera´82), Víctor Ruiz, Jaume Costa; Jonathan Dos Santos, Trigueros (Pina´64), Bruno, Denis Suárez; Soldado, Bakambu (Nahuel´72).
1- Sevilla FC (4-2-3-1): Sergio Rico; Coke
(Mariano´60), Kolo, Rami, Trémoulinas; Krychowiak, Krohn-Dehli (N´Zonzi´60);
Vitolo, Iborra (Llorente´69), Konoplyanka; Gameiro.
Goles: 1-0 Mario min.25, 2-0 Bakambu min.60, 2-1 Llorente
min.75.
Árbitro: Sánchez Martínez (Comité murciano). Enseñó la tarjeta
amarilla a Bailly (10´), Iborra (29´), Bakambu (32´), Soldado (50´), Rami (62´), Jaume Costa (86´), Konoplyanka (88´) y Jaume Costa (89´).
Datos: Encuentro correspondiente a la jornada 10 de la Liga BBVA 2015/16 disputado en El Madrigal ante 21.000 espectadores.
Datos: Encuentro correspondiente a la jornada 10 de la Liga BBVA 2015/16 disputado en El Madrigal ante 21.000 espectadores.
El Villarreal tuvo un arranque prometedor, mandando con
claridad y llegando con peligro sobre las inmediaciones del área sevillista.
Bruno buscó el gol en el primer minuto con un remate cruzado al que respondió
Sergio Rico. El Sevilla lo pasó mal en los primeros minutos, dominado, y con
problemas para salir desde atrás. Una vez superó la fuerte presión del
Villarreal, tuvo una pequeña tregua que le permitió respirar y ganar terreno.
Avisó en una de las modalidades que mejor se le dan, el balón parado.
Krohn-Dehli botó con criterio una falta al corazón del área. Falló Krychowiak
al conectar el remate, muy arriba de la portería amarilla. Esta acción fue la
única de peligro en la primera parte de un Sevilla que pecó, sobre todo, de
profundidad. La lesión de Banega, el mayor generador de fútbol hispalense, que además estaba en
un gran momento, supuso un déficit a la hora de encontrar pases precisos para Gameiro, Vitolo y Konoplyanka.
Mario y Bakambu hicieron justicia a la superioridad del Villarreal
Mario y Bakambu hicieron justicia a la superioridad del Villarreal
En el ecuador del primer tiempo, llegó el segundo arreón
del Villarreal. Esta vez, eso sí, traducido con premio. Llegó en un corner botado por Denis Suárez y materializado por Mario. El lateral derecho internacional le
robó la cartera a la zaga hispalense en un toma y daca en el área chica.
Encontró una optima posición para el remate y la cruzó al palo largo,
haciendo inútil la estirada de Sergio Rico. Antes del 1-0, Bakambu y el
propio Mario ya avisaron, pero no estuvieron atinados en sendos remates. A
partir del gol, el Villarreal se replegó, haciéndose fuerte atrás tratando de
dejar la portería a cero. El Sevilla dio un pase adelante, tuvo mayor posesión,
pero fue totalmente estática. Gameiro estuvo desasistido y Konoplyanka,
desaparecido, lo que mermó al Sevilla considerablemente. El doble pivote Krohn-Dehli y Krychowiak va sobrado de consistencia,
pero no de clarividencia. Iborra, en posición más adelantada, no tuvo tampoco su día y no aportó llegada.
En la segunda parte, más de lo mismo. El Villarreal
siguió controlando la situación. Primero replegado, impidiendo que el Sevilla
encontrase huecos con los que generar ocasiones. El Sevilla reclamó un penalti de Víctor Ruiz sobre Gameiro, pero Sánchez Martínez no señaló nada. Posteriormente, cuando el
‘submarino’ se estiró, llegó el segundo tanto en el 61´. Mario aprovechó un
pase al espacio para ganar la espalda de Trémoulinas, la puso al segundo palo,
donde Denis Suárez se la sirvió en bandeja a Bakambu. El ‘cocodrilo’ definió con un
disparo potente que superó a Sergio Rico.
El Sevilla reaccionó demasiado tarde
Emery, viendo que la zona de Champions se le escapaba, movió banquillo. Entraron N´Zonzi, Mariano y Llorente. Este último, que salió en la recta final por Iborra, mejoró considerablemente al Sevilla. Aportó llegada y, sobre todo, creó mucho peligro en el juego aéreo. De hecho, suyo fue el gol del Sevilla, de cabeza, aprovechando un centro de Konoplyanka desde la izquierda. Le hacía falta marcar a Llorente y ganó enteros, ya que su inicio con el Sevilla no está siendo el esperado. Tal vez, el gol de hoy suponga un punto de inflexión ante la dura competencia con Gameiro (Immobile se ha quedado atrás).
Al haber realizado ya los tres cambios, el Sevilla tuvo que jugar los últimos minutos con un hombre menos al retirarse lesionado Gameiro. Paradojas del fútbol, pero el Sevilla jugó mejor con diez que con once. Ya sea porque le va la heroica o porque solo le valía salir vivo, lo cierto es que se envalentonó y estrechó el cerco de lo lindo. El Villarreal defendió como gato panza arriba los balones colgados que le llegaban. Konoplyanka se echó al equipo a sus espaldas y casi le vale al Sevilla para sacar algo positivo al final. El ucraniano aportó una asistencia y se fabricó una clara ocasión. Konoplyanka y Llorente pudieron rescatar al Sevilla de El Madrigal, pero Areola se mostró muy acertado y salvó los muebles. Denis Suárez, que cuajó un gran partido frente a su ex equipo, pudo ahorrar la agonía de haber tenido mayor fortuna. La madera evitó que marcara un golazo en un gran disparo desde la frontal. Al final, con el 2-1, respiró el Villarreal que ganó con justicia al ser mejor durante casi todo el partido. El Sevilla reaccionó demasiado tarde y se fue de vacío de El Madrigal.
Manuel Monfort MarzáEl Sevilla reaccionó demasiado tarde
Emery, viendo que la zona de Champions se le escapaba, movió banquillo. Entraron N´Zonzi, Mariano y Llorente. Este último, que salió en la recta final por Iborra, mejoró considerablemente al Sevilla. Aportó llegada y, sobre todo, creó mucho peligro en el juego aéreo. De hecho, suyo fue el gol del Sevilla, de cabeza, aprovechando un centro de Konoplyanka desde la izquierda. Le hacía falta marcar a Llorente y ganó enteros, ya que su inicio con el Sevilla no está siendo el esperado. Tal vez, el gol de hoy suponga un punto de inflexión ante la dura competencia con Gameiro (Immobile se ha quedado atrás).
Al haber realizado ya los tres cambios, el Sevilla tuvo que jugar los últimos minutos con un hombre menos al retirarse lesionado Gameiro. Paradojas del fútbol, pero el Sevilla jugó mejor con diez que con once. Ya sea porque le va la heroica o porque solo le valía salir vivo, lo cierto es que se envalentonó y estrechó el cerco de lo lindo. El Villarreal defendió como gato panza arriba los balones colgados que le llegaban. Konoplyanka se echó al equipo a sus espaldas y casi le vale al Sevilla para sacar algo positivo al final. El ucraniano aportó una asistencia y se fabricó una clara ocasión. Konoplyanka y Llorente pudieron rescatar al Sevilla de El Madrigal, pero Areola se mostró muy acertado y salvó los muebles. Denis Suárez, que cuajó un gran partido frente a su ex equipo, pudo ahorrar la agonía de haber tenido mayor fortuna. La madera evitó que marcara un golazo en un gran disparo desde la frontal. Al final, con el 2-1, respiró el Villarreal que ganó con justicia al ser mejor durante casi todo el partido. El Sevilla reaccionó demasiado tarde y se fue de vacío de El Madrigal.
Redactor - MotivaGoal
Twitter: @Manuelmonfort