El Villarreal lo
solventó en la primera parte y le sobró la segunda. En los primeros 45 minutos,
el Villarreal fue claramente superior a Osasuna y decidió con tres goles antes
del descanso, obra de Pato, Bruno y Sansone. Justo antes del descanso, Roberto
Torres, de penalti, dio un atisbo de esperanza a Osasuna que se apagó en la segunda
parte, pese a la mejoría. El Villarreal, más contragolpeador, no vio
peligrar un triunfo que le deja cuarto, en puestos de Champions. Osasuna sigue
sin ganar y se mantiene colista con solo 2 puntos.
3- Villarreal CF (4-4-2): Asenjo; Mario, Álvaro, Víctor
Ruiz, Jaume Costa; Castillejo, Trigueros, Bruno, Soriano (Cheryshev´73); Pato
(Jonathan Dos Santos´62), Sansone (Santos Borré´78).
1- CA Osasuna (4-4-2): Mario Fernández (Álvaro
Fernández´46); Tano, Miguel Flaño, David García, Fuentes; Oier, Roberto Torres,
Fran Mérida (Olavide´55), Clerc (Jaime Romero´46); Rivière, Sergio León.
Goles: 1-0 Pato min.5, 2-0 Bruno (p) min.24, 3-0 Sansone
min.39, 3-1 Roberto Torres (p) min.45
Árbitro: Ocón Arráiz (Comité riojano). Enseñó la tarjeta
amarilla a Mario (23´), Álvaro (45´), Olavide (62´)
Datos: Encuentro de la 6ª jornada de LaLiga
Santander 2016/17 disputado en El Madrigal ante 19.000 espectadores. Terreno de
juego en perfectas condiciones.
El Villarreal
decidió en la primera parte. Fue superior a Osasuna, plasmando un fútbol alegre
y teniendo efectividad y pegada. Brilló todo el frente ofensivo, especialmente
un Castillejo que dio dos asistencias. El submarino,
que en otras ocasiones empezó dormido, salió bien. Se hizo con el balón y buscó
la meta rojilla con intensidad y sin contemplaciones. Y, a la primera ocasión,
gol. Llegó pronto, en el 5´, fruto de una buena jugada elaborada. Trigueros la
puso con calidad al carril derecho, donde Castillejo asistió a Pato, que de
cabeza, puso los cimientos de la victoria.
Pese al jarro de
agua fría, Osasuna no le perdió la cara al partido y discutió el dominio.
Rivière tuvo dos acercamientos que no concretó. El delantero francés perdonó,
lo contrario que el Villarreal, que antes de la media hora ya tenía el choque
encarrilado con la llegada del segundo. Lo marcó Bruno de penalti, cometido por
Mario sobre Soriano. Claro. Osasuna, ahora sí, acusó el mazazo. Defensivamente,
hizo aguas en el repliegue. No cortó sobre todo las transiciones al espacio. El
Villarreal, en las jugadas entre líneas, encontró vías de entrada. De hecho,
así llegó el 3-0 en el 39´, fruto de otra jugada cocinada. Nació con una pared
entre Pato y Castillejo en tres cuartos. El malagueño se sacó un excelente pase
al hueco a la espalda de los centrales que dejó solo a Sansone. El italiano se
la picó a Mario con sangre fría y calidad. Justo antes de ir al descanso,
Osasuna encontró un pequeño resquicio. Sergio León se marcó un jugadón en el
área amarilla y fue derribado por Álvaro. Penalti. Roberto Torres lo transformó
y puso el 3-1, dando una pequeña esperanza que no fue tal.
Tras el descanso,
Enrique Martín introdujo un doble cambio buscando la reacción. Entraron Jaime
Romero, que le dio a Osasuna más llegada en la izquierda, y el portero Álvaro
Fernández. Llamativo el cambio de portero. El joven arquero del filial,
internacional sub-19, debutó con el primer equipo. Ya sea por los cambios o por
la charla de Enrique Martín al vestuario, Osasuna en la segunda mitad le puso
mayor intensidad. La manija estuvo repartida, con Osasuna buscando otro gol que
le metiese de lleno. El Villarreal, más contragolpeador en la segunda parte,
ralentizó el ritmo, compaginando pasar los minutos y aprovechar una ocasión
para sentenciar. Trigueros dispuso de dos buenas ocasiones para ello, pero no
encontró el premio del gol, al igual que Santos Borré y Castillejo en una doble
opción cerca del final. Por su parte, Sergio León y Rivière
intentaron meter sin éxito a Osasuna en el partido. Pese a intentarlo y ofrecer
una imagen mejorada, Osasuna no logró el segundo.
Manuel Monfort Marzá
MotivaGoal
Twitter: @Manuelmonfort
