Los aficionados del United celebran por
partida doble: la Community Shield y el fichaje de Pogba.
Horas antes de disputarse la final de la
Supercopa inglesa, el club anunció en Twitter que Pogba tenía autorización para
pasar la revisión médica, previo paso a su vuelta a Old Trafford. A posteriori,
los ‘red devils’ conquistaron la Community Shield. Se impusieron 2-1 a la
sensación de la temporada pasada, el Leicester de Ranieri que contra todo
pronóstico se hizo con la Premier League. Rashford adelantó a los de Manchester
mediante una gran jugada individual. Vardy empató tras aprovechar un clamoroso
error de Fellaini en el pase. Cuando la final ya agonizaba, Ibrahimovic desempeñó
su rol desequilibrante a la perfección: remate de cabeza ajustado al palo
(entró dentro con ayuda de este) que supuso el 2-1 definitivo y, a la postre,
el título para el United. Ibra le dio a Mou su primer título como técnico del
United.
Mourinho descubrió su primera baraja. El portugués
puso en liza un 4-2-3-1 con De Gea; Valencia, Bailly, Blind, Shaw; Carrick,
Fellaini; Lingard, Rooney, Martial; Ibrahimovic. No entró Mkhitaryan, otro
fichaje estrella de esta campaña. Por el armenio entró Lingard, que aprovechó
su oportunidad. Cuando Pogba esté listo, en un principio, ocupará el sitio de
Fellaini, por lo que el once quedará perfilado a la espera de otro fichaje
(Fabinho por Valencia).
Pogba lidera una
esperanzadora nueva era
Por la innegable calidad que atesora, más el desproporcionado
desembolso económico realizado, se espera que Pobga ejerza de nuevo abanderado
(con permiso de Ibra, al menos a corto plazo) en el nuevo ciclo del United.
Pogba tuvo que salir por la puerta de atrás para volver como estrella. Es
innegable la mala gestión del club, al tener que poner más de cien millones por un
canterano que no supo retener ni darle la oportunidad. Pero pesa más el
presente y el futuro. Pogba, Ibrahimovic, Mkhitaryan y Bailly, el United ha
sido el gran animador veraniego, incorporando piezas de altísima calidad con
las que recuperar el brillo de la época Ferguson.
Pogba dejará patente su descomunal potencia
física en el centro del campo. Dará energía, brío, sin obviar sus otras
virtudes. La llegada es una de ellas. Pogba gusta de cabalgar libre, sin ataduras,
pisando aérea y haciendo gala de su fuerte disparo. Ahora bien, ha funcionado
mejor en una línea de tres mediocentros que de dos, tal y como se vio en la
Eurocopa de Francia. En el 4-2-3-1 final de Deschamps, Pogba no brilló salvo en
momentos puntuales. Con Mourinho defender es innegociable, por lo que el
francés no estará exento de realizar tareas oscuras. Pogba tendrá un rol de ‘box
to box’, lo que le restará presencia ofensiva. Pero potencial, calidad y margen
de mejora tiene de sobra para colmar las expectativas en torno a su figura. Por
lo pagado y por lo que supone, se espera lo máximo del crack francés en Old
Trafford.
Manuel Monfort Marzá
MotivaGoal
Twitter: @Manuelmonfort