El
Espanyol llevó el partido a su terreno y neutralizó a un
Villarreal que no se sintió cómodo. Predominó la igualdad en un
duelo táctico, de riesgo medido y carente de goles. Y eso que hubo
ocasiones. Pero los porteros, Pau y Barbosa, unido a la pólvora
mojada, dejaron el casillero a cero.
0-
Villarreal CF (4-4-2): Barbosa; Mario,
Álvaro, Víctor Ruiz, Jaume Costa; Castillejo, Trigueros
(Fornals´80), Rodrigo, Cheryshev (Soriano´60); Bacca (Ünal´66),
Bakambu.
0-
RCD Espanyol (4-4-2): Pau López; Víctor
Sánchez, David López, Hermoso, Aarón; Baptistao, Javi Fuego,
Darder, Piatti; Jurado; Gerard Moreno.
Goles:
Árbitro:
Munuera Montero (Comité andaluz). Amonestó
a Bacca (30´), Bakambu (40´), Trigueros (71´), Álvaro (73´),
Víctor Sánchez (76´), Fornals (85´) y Javi Fuego (85´).
Datos:
Encuentro de la 5ª jornada de La Liga disputado en El Estadio de la
Cerámica. 17.094 espectadores. Se guardó un minuto de silencio en
memoria de las víctimas de México y del ex jugador del Villarreal,
José Luis Linares.
Fran Escribá y
Quique, tan juntos antes y distantes ahora, dibujaron un duelo de
pizarra y cartabón. Todo calculado al milímetro sin lugar a la
improvisación. Una partida de ajedrez que terminó sin goles, pero
que pudo caer de cualquier lado. Con todo, el resultado puede
considerarse justo, ya que la igualdad fue máxima. Seguramente faltó fútbol, pero no emoción y suspense.
La primera parte
fue de dominio alterno. Salió el Espanyol más avispado, con el ojo puesto en Barbosa. Avisaron Jurado y Baptistao. El Villarreal, una vez se
reactivó el centro del campo, replicó al conjunto perico. El duelo
se convirtió en un toma y daca, con alternancia de iniciativa y
contra. Había precaución y cierta osadía, lo que propició amenaza de gol. El Espanyol creó peligro a balón parado, así olió
el gol. Hermoso remató de cabeza con peligro un corner. Barbosa le
dejó sin premio. Igual que Pau a Bakambu y Castillejo, sobre el que
se reclamó un penalti. Trigueros casi logra uno de los goles de La
Liga. Desde unos 25 metros la colocó a la escuadra. Por centímetros no fue dentro.
Quique decidió
ceder terreno en la segunda mitad. Le dio el balón al Villarreal,
que se atascó ante un rival bien pertrechado. Castillejo creó
peligro en la primera parte, pero en la reanudación fue a menos. No fue
el Castillejo de las últimas jornadas pero, junto a Bakambu, se mostró como el más activo. Con Bacca desafortunado hoy, Cédric tiró del
carro en la segunda parte y suyas fueron las acciones más
importantes del submarino. El congoleño, tras una magnifica
roulette, tuvo el gol. Pau le cerró las puertas. El cancerbero
espanyolista, respaldado por David López y Hermoso, puso el candado; Darder controló la medular y Jurado y Gerard
trenzaron con peligro. Gerard, que este verano pudo volver al
Villarreal, tuvo oportunidad de liarla. Barbosa no quiso ser menos
que Pau.
Los cambios no
cambiaron nada. Soriano, que entró por un Cheryshev que aún no está
para estos lares, no decidió. El partido reclamaba velocidad y el
italiano necesita ritmo para ser el futbolista diferente del pasado
curso. Javi Fuego y Ünal tuvieron la última oportunidad de cambiar el rumbo. Les entró vértigo de verse en las portadas y la
contienda terminó sin goles. El Espanyol paró a un Villarreal con problemas en estático. El submarino se queda noveno, a 2 puntos de Europa. El Espanyol, decimosexto, se sitúa 1 punto por
encima del descenso. Este fin de semana otro capítulo.
Manuel Monfort Marzá
MotivaGoal
Twitter: @Manuelmonfort