Luis Suárez, agitador y salvador. El Barcelona salió airoso de la
dificultad que le planteó el Inter de Conte. Gracias, sobre todo, al acierto de
Suárez. No parecía posible dicho desenlace en los primeros 45
minutos. El Inter fue muy superior a un Barcelona empequeñecido. Lautaro marcó
el 0-1 en el minuto 2 y Ter Stegen le negó el doblete y la sentencia. Pero, en la segunda parte, a partir de la entrada de Vidal, el
Barcelona fue otro. Precisamente, Vidal asistió a Suárez y este empató mediante
una magnifica volea. De nuevo Suárez, tras un gran servicio de Messi, marcó el
gol de la victoria en el minuto 84.
Liverpoool 4-3 Salzburgo: oda al fútbol. El Liverpool se encontró un
Salzburgo hecho a su imagen y semejanza, de ahí el toma y daca sin control y con
goles. Muchos goles. El Liverpool realizó un inicio arrollador con
verticalidad, presión alta y velocidad. Gracias
a ello se puso 3-0, pero, Hwang Che-Haan dio vida al Salzburgo antes del
descanso. En la segunda parte ocurrió lo inesperado. El Liverpool se relajó y
el combinado austriaco se puso 3-3. Mérito enorme sobreponerse a un 3-0 en
Anfield ante este Liverpool. El empate, sin embargo, activó la maquinaria red. Salah puso el definitivo 4-3. Así terminó un
espectáculo digno de Anfield.
Fútbol y cuestión de puntería, el Ajax en Mestalla. El Ajax tuvo el
acierto que le faltó a un Valencia de pólvora mojada. El conjunto de Ten Haag paseó
en Mestalla su fútbol coral. El 0-3, sin embargo, no reflejó tanta superioridad.
Ziyech adelantó al conjunto ajacied
al principio del choque. Parejo, poco después, desperdició un penalti. De
haberlo metido, quizás el Valencia hubiera vivido un partido distinto. Pero
perdonó y Promes le castigó con el segundo. Las ocasiones siguieron en ambas
áreas y Van der Beek estableció el definitivo 0-3. El Ajax se aleja del
Valencia y el conjunto ché queda empatado a puntos con el Chelsea. Oportunidad
perdida.
El Chelsea respira a costa del Lille. Después de perder ante el
Valencia, los de Lampard necesitaban ganar al Lille con tal de no quedarse descolgado.
Tammy Abraham –uno de los jóvenes valores del rejuvenecido Chelsea– adelantó a
los londinenses, Osimhem insufló de esperanza al Lille y Willian, en la recta
final, dio la vida al Chelsea. Tres puntos cruciales.
Achraf, lateral con gol. Dos goles del marroquí le dieron al
Dortmund la victoria ante el Slavia de Praga en territorio checo. El lateral exhibió
potencia física, regate y remate con las dos piernas. Achraf desniveló un
partido de poder a poder. El Slavia de Praga vendió cara la derrota y demostró
que el empate ante el Inter en San Siro no fue casualidad. Rival a tener en
cuenta.
Rebelión belga. Los equipos de Bélgica están de moda. El
Brujas sonrojó al Real Madrid y el Genk hizo lo propio al Nápoles, que venía de
vencer 2-0 al Liverpool y desperdició una buena oportunidad de afianzar el
primer puesto. El conjunto partenopei careció
de acierto rematador. El Genk, con el paso de los minutos, ganó confianza e
Ianis Hagi tuvo la victoria.
El Lyon de Sylvinho encontró el bálsamo en Alemania. El Lyon venció 0-2 al Leizpig, triunfo
necesario para Sylvinho, el primero como técnico del Lyon. El que fuera jugador
del Barcelona veía tambalearse su proyecto después de un inicio sin victorias. El
Leizpig, que nunca bajó los brazos, pagó sus errores defensivos y su falta de
acierto sobre la meta de Anthony Lopes.
Poco Benfica para el Zenit. El combinado zarista se deshizo de un Benfica
que opuso poca resistencia. El Zenit maduró el encuentro a su antojo y se puso
3-0 de manera cómoda. Raúl de Tomas maquilló el resultado, no la imagen de un
flojo Benfica que echa en falta a Joao Félix.
Manuel Monfort Marzá
MotivaGoal
Twitter: @Manuelmonfort