Los cimientos de la mejora del
Espanyol se han asentado a partir de dos nombres propios: Abelardo y Raúl de
Tomás. El primero llegó a final de año como el tercer entrenador de esta
temporada tras David Gallego y Pablo Machín. Cogió un equipo a la deriva y, en
tan solo tres partidos, ha revertido la situación. De Tomás, por su parte,
fue uno de los refuerzos de invierno y se convirtió en el fichaje más caro de la
historia del Espanyol (20 millones). Ante el Villarreal, debut en La Liga y gol decisivo.
Un Espanyol que en La Cerámica logró
más que una victoria. Por dos razones. Por lo que supone: acercarse a la
permanencia (4 puntos) y cortar una mala racha de nueve jornadas sin ganar; y
por la forma que se produjo: aguantó con diez el asedio del Villarreal en la
última media hora. Los numerosos hinchas desplazados a Villarreal fueron un
espaldarazo anímico que reforzó a los jugadores, especialmente cuando
estuvieron en inferioridad numérica.
Se confirmaron, por lo tanto, las
buenas sensaciones de los dos primeros partidos de Abelardo, saldados con un
meritorio empate ante el Barcelona y la clasificación en la Copa frente al San
Sebastián de los Reyes. Abelardo ya ha hecho del Espanyol un equipo de autor,
fiel a sus señas de identidad: seguro en defensa, trabajado en lo táctico e
intenso. Un equipo combativo.
La fuerte inversión en fichajes
supone otro argumento de peso que explica la mejoría. El Espanyol no está
escatimando en gastos para revertir la situación. A parte de De Tomás, ha
llegado Leandro Cabrera, del Getafe, por 9 millones, para reforzar la zaga. Volviendo
a De Tomás, este aporta gol, algo que marca la diferencia y que el Espanyol no
tenía y que tanto le había penalizado en la primera vuelta. De Tomás, además,
también ya está empezando a olvidar a Borja Iglesias, baja que el Espanyol no
había suplido con garantías hasta ahora.
Con Abelardo y De Tomás la
afición perica cree. Tiene fe en la permanencia. Después de vencer al
Villarreal, la salvación está a 4 puntos. Un poco más cerca, pero queda mucho
camino. Una senda que Abelardo ya realizó con éxito en el Alavés. Lo salvó
cuando se hizo cargo del combinado albiazul y lo mejoró en temporadas posteriores.
Ahora buscará hacer lo mismo y, para ello, contará con los goles de Raúl Tomas,
además de la versatilidad de Darder, el descaro de Melendo y la seguridad de
Diego López.
Si el Espanyol sigue esta línea
ascendente, quizás, pueda permitirse disfrutar de la Europa League con
tranquilidad. Pero lo primero pasa por la permanencia. Los aficionados respiran
más aliviados, pero no estarán tranquilos hasta verse fuera del descenso. Con
Abelardo a los mandos y De Tomás perforando la meta rival se sienten más
seguros.
Manuel Monfort Marzá
MotivaGoal
Twitter: @Manuelmonfort
